El déficit de lluvias que afecta a gran parte del país comienza a evidenciar las repercusiones en la producción agrícola y ganadera.

De acuerdo a los datos otorgados por la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), el faenamiento de bovinos presentó un alza durante los primeros meses de este año debido a las malas condiciones agroclimáticas.

A nivel nacional, este año, en comparación con enero de 2014, si bien baja el número de novillos beneficiados, se observa un fuerte aumento de vacas (29%), especialmente de carnaza (134,3%). También aumenta el número de vaquillas (12,1%).

Y la Región de Los Lagos concentró el 28,1% del total de faenamiento en el país durante enero, lo que se traduce en 20.558 cabezas de bovinos.

En cuanto al faenamiento de vacas en la Región en enero-febrero de 2015, la cifra creció 42% en comparación al mismo período del año pasado, con 14.017 cabezas de ganado versus los 9.821 animales del año 2014.

Asimismo, el beneficio de vaquillas en los frigoríficos también presentó un alza de 11% en ambos meses de este año en relación al mismo periodo del año pasado.

Lo contrario ocurre con los novillos, cifra que cayó en 15% en comparación a 2014 y los terneros en 5,9%.

La liquidación de vacas y vaquillas, situación gatillada por la escasez de pasto en las praderas y por ende el consumo anticipado de forraje destinado a los meses de invierno a raíz de la sequía, sumado a los bajos precios del mercado, representa un panorama alarmante para el sector agrícola de la zona.

El productor lechero del sector Pelleco en Osorno, Augusto Willer, dueño de dos predios con 320 hectáreas, cuenta que desde diciembre 2014 comenzó a vender sus animales, debido a que contaba con más ganado que superficie apta para su alimentación. Y obligado por el déficit hídrico anticipó el consumo del forraje destinado a los meses de invierno.

"Tengo más de mil animales en mis dos lecherías. Por la sequía estaba gastando mucho forraje y cuando falta alimento hay 2 opciones: comprar más o disminuir el ganado, no tenía sentido comprar alimento porque gastaría más de lo que estoy ganando. Como la situación se veía grave, decidí vender cerca del 10% de mi rebaño", comentó.

Además, Willer señala que compró bolos de pasto para alimentar al 40% de su ganado que se estaba quedando sin abastecimiento.

"Por la falta de lluvias un buen porcentaje de las praderas murió, ahora que volvieron las precipitaciones estimo que se necesita como mínimo un mes para recuperar en algo los suelos", indicó.

Willer critica que como mediano productor no recibe ningún tipo de ayuda de las autoridades, por el contrario, la baja de los precios también los perjudica.

"El precio en las ferias es horroroso, el kilo está a 250 pesos menos de lo normal, lamentablemente el único destino de mis animales era la feria. Y como estaba afectando la producción de leche, tuvimos que vender vacas y vaquillas", relató.

impacto en el rebaño

El presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (Sago), Cristián Arntz, explicó que el aumento de la producción cárnica por la liquidación de ganadería a raíz de la sequía "está siendo la única alternativa para los agricultores, ya tenemos dos años de precios que no hacen atractiva la ganadería. Es más, en los últimos cuatro meses hemos tenido precios muy por debajo del Mercado Común del Sur (Mercosur), lo cual afecta sin duda al ganadero local que no tiene opción más que vender sus animales", expresó.

Agregó que a la fecha los productores han consumido el 50 por ciento del forraje destinado para invierno, a partir de lo cual se podría inferir que la producción de ganado y leche se reduciría en 25% durante los próximos meses.

Harry Jürgensen, gerente del grupo Feria Osorno, hizo énfasis en el efecto de la sequía en la producción lechera, lo que ha elevado el nivel de desecho de los animales, "dado que las vacas no tienen agua y por lo tanto alimento, dejan de producir, baja la calidad de la leche también, entonces el productor debe esperar al próximo ciclo que sería la primavera. Por una necesidad de recursos, ellos tienen que vender y deshacerse del ganado", dijo Jürgensen.

El ejecutivo además señaló que a largo plazo el problema podría agravarse, ya que se está disminuyendo la masa ganadera chilena.

Precisamente esa preocupación es la que plantea Jorge Gasic, gerente de la planta Frigorífico Valdivia (Frival), quien comenta que de persistir la tendencia en eliminación de vientres productores (vacas y vaquillas), los mayores impactos se visualizarán en un par de años con la menor disponibilidad de ganado, tanto de carne como de leche.

Gasic califica la tendencia al alza en la faena de bovinos hembras como desalentadora.

"La ganadería de nuestro país tiene un gran componente lechero y los vaivenes en el precio de la leche además del de la carne, juegan un rol importante en la mayor o menor eliminación de vientres", dijo.

Gasic señala que es deber del Estado y del sector pecuario consensuar un diagnóstico respecto de los factores que afectan al rubro, con la finalidad de diseñar instrumentos de apoyo a largo plazo.

"Es de esperar que el empobrecimiento de nuestra ganadería regional, producto de la sequía brutal que nos afectó, pueda ser compensado con algún instrumento de apoyo o al menos con un otoño e invierno más favorables", añadió.

Sin embargo, y a pesar que el precio de la leche ha tenido algunos reveses en el último tiempo para el productor, aclara Gasic, aparecen hoy oportunidades importantes en la exportación de carne, de la mano de un tipo de cambio bastante favorable.

Es el caso de las exportaciones, donde enero presentó un crecimiento significativo de los envíos a Estados Unidos y Alemania, liderados no sólo por la Región de Los Lagos, sino también en parte importante por la Región de Los Ríos.

precios

En cuanto a la situación de precios a la cual aluden los productores, el promedio de enero y febrero de 2015 en vacas gordas fue de 598 pesos por kilo, lo que representa un alza de 4,1% respecto del promedio de dichos meses del año pasado.

Las vaquillas, por su parte, presentaron una disminución de 5,5%, donde pasaron de 830 pesos en 2014 a 784 el kilo este año.

Y el valor de los novillos gordos, en tanto, bordeó los 905 pesos por kilo, lo cual representa un alza del 2,7% comparado a igual período de 2014.

El precio promedio de las vacas registró un alza de 4,1% en enero y febrero de este año, con 598 pesos por kilo.

20.558 cabezas

de ganado bovino fueron faenadas en enero de 2015 en la Región de Los Lagos, liderando con un 28,1% del total de animales a nivel nacional; luego está la Región de La Araucanía.

Precio de las vacas gordas

presentó un alza durante el período. Creció 4,1% respecto del promedio de enero y febrero de 2014, llegando a los $598 comparado a los $574 del año anterior.

14.017 vacas

fueron faenadas entre enero y febrero de 2015 en la Región de Los Lagos, un 42% más a lo registrado en 2014. A la lista le siguen las vaquillas, y con índices negativos novillos y terneros.