Médico combina atenciones con canto lírico en matrimonios y licenciaturas
talento. Héctor Andrade posee una voz privilegiada que descubrió casi por casualidad, la cual comparte en diversas presentaciones paralelas a su carrera en el Hospital de Río Negro.
Más allá de su delantal blanco, el médico osornino Héctor Andrade deslumbra al público de matrimonios, licenciaturas y aniversarios con su canto lírico, veta artística que descubrió hace ya 10 años.
Héctor Andrade Miranda, quien actualmente se desempeña como médico general de zona en el Hospital de Río Negro, egresó en diciembre de 2013 de la Universidad Austral de Chile en Valdivia.
Cursó sus estudios básicos en la Escuela Efraín Campana, para luego integrarse al Liceo Carmela Carvajal de Prat, establecimiento donde terminó sus estudios en el año 2004.
Fue precisamente en la enseñanza media donde comenzó a descubrir un talento, que luego se transformaría en su escape de la rutina diaria.
taller
Casi por casualidad y dada la obligación de participar en al menos un taller extraprogramático, el entonces estudiante secundario decidió inscribirse en el coro del liceo.
Fue de este modo que Héctor comenzó a descubrir que tenía una voz privilegiada, la cual sin saberlo aún, sería causal incluso para encontrar a la que sería su futura esposa, quien también pertenecía a dicho conjunto coral.
"En el Liceo interpretábamos obras clásicas, que en algunos casos incluían a un solista, siendo ellos mis primeros pasos como tenor", explica el médico
Tras culminar su enseñanza media, Héctor ingresó a estudiar Medicina el año 2007, y para no perder las ganas ni el entusiasmo que conlleva tener una voz de excepción, decidió integrarse al Coro de la Universidad Austral, donde participó hasta el término de sus estudios, siendo invitado además y en forma paralela, a seguir colaborando con el coro de su antiguo liceo, en su calidad de ex alumno.
en alemania
Esta experiencia lo llevó a recorrer varias ciudades el país, sobre todo la zona sur, realizando presentaciones para diversas instancias y fechas especiales. Hasta el momento, el principal escenario que ha sido testigo del talento de Héctor es Berlín, ciudad alemana que visitó junto al coro de la casa de estudios valdiviana el año 2008. Ahí ofrecieron cuatro conciertos, donde el profesional ocupó el rol de solista.
"Estas experiencias son algunas de las satisfacciones que da el canto lírico, algo que en estos instantes lo tomo como un relajo que me permite escapar de las responsabilidades diarias", asegura el médico.
Agregó que "en su momento pensé en estudiarlo como una carrera, pero me arrepentí".
bajo perfil
Héctor cuenta que por ningún motivo se compara con los grandes cantantes líricos existente ya que todo lo aprendido hasta ahora es fruto del esfuerzo que sus profesores han puesto en cada uno de los coros en que participa, aunque si de él depende, cantaría toda su vida, siempre como una actividad secundaria.
El profesional de la salud se encargaba de mantener bajo perfil su afición por este arte, aunque muchos de sus colegas y ex compañeros de universidad saben de sus dotes, lo cual significa ser considerado para un sinnúmero de eventos y actividades.
"En Río Negro, por ejemplo, canté para el Día del Hospital, para la cuenta pública de la Fiscalía, licenciaturas en colegios, matrimonios e incluso canté para mi propia titulación. Como ex alumno, el Liceo Carmela Carvajal me sigue considerando para sus presentaciones, como la realizada recientemente en la Catedral de Osorno", sostuvo el tenor.
Este profesional conoció en el año 2002, mientras participaba en el coro de su liceo, a la que sería su actual esposa, Lilian Vidal Gallardo, tecnóloga médica con la que ha compartido diversos escenarios, aprovechando el registro de soprano que la vida le entregó como regalo, siendo casi dos los años de casados y una década de relación amorosa.
Pese a que siempre participa de presentaciones cuando es requerido, el facultativo comenta que faltan espacios en la ciudad para mostrar y perfeccionar el canto lírico, con el objeto de que sean muchos más quienes se interesen y descubran un talento que muchos no saben que poseen, tal como le sucedió a este médico hace ya más de una década.
Por ello, además de su profesión, en su tiempo libre se dedica a interpretar los temas de grandes tenores internacionales.