Al interior de la Carnicería República, en la avenida del mismo nombre, fue sorprendido la madrugada de ayer un ladrón que se había escondido en el baño para evitar ser arrestado.

El sujeto, identificado por Carabineros solo con las iniciales J.L.B.O., pretendía llevarse un saco lleno de carne y cecinas desde la empresa, la que fue hallada más tarde en el recinto y avaluado su contenido en 400 mil pesos.

Una persona que vive en el mismo recinto comercial se dio cuenta cerca de las 5 de la madrugada que algo extraño ocurría, luego de sentir ruidos en la techumbre del local. Al salir a verificar observó que desde la carnicería alguien había quebrado una ventana del segundo piso para entrar y con una linterna encendida iluminaba su camino.

Luego de llamar al propietario de la empresa, el agricultor Delfín Ojeda, y a la policía, encontraron un saco en cuyo interior había carne y cecinas.

Luego de establecer la forma como actuó el ladrón, los funcionarios se percataron que el sujeto aún se encontraba en la carnicería. Tras revisar las dependencias llegaron al baño, donde estaba el oculto el individuo.

El delincuente fue presentado ayer al Juzgado de Garantía de Osorno, donde quedó con medidas cautelares por el intento de robo.

Un hombre de 55 años, identificado como Fernando Toledo Moreya, murió la noche del lunes en plena calle Los Pumas, al llegar a Luis Cruz, en el sector de Francke.

El adulto tenía antecedentes de problemas al corazón. De hecho, el registro médico indica que sufrió múltiples ataques. Precisamente un infarto cardíaco terminó por quitarle la vida a las 23.39 del lunes.

Toledo caminaba por calle Los Pumas cuando los vecinos del sector lo vieron caer al suelo, por lo que avisaron a Carabineros del retén Pampa Alegre. Tras su llegada, la policía solicitó que personal del Samu acuda al lugar para atención médica, pero el hombre falleció antes de ser auxiliado.

Sergio Silva Vásquez

Dos casonas de más de 70 años del barrio Estación de Río Negro, uno de los sectores más antiguos de la comuna, quedaron destruidas por la acción del fuego, tras desatarse un incendio la madrugada de ayer.

La emergencia fue reportada a la una de la mañana en calle Balmaceda por un automovilista que pasaba por el sector, quien alertó a los moradores del inmueble sobre el fuego.

Las llamas se apoderaron de la construcción de un piso y debido al viento, éstas se propagaron a una antigua casona de tres pisos. Ambos inmuebles eran propiedad de los hermanos Cornelio y Zulema Segovia, quienes hace años dejaron la comuna.

Debido a que los inmuebles se encontraban en abandono, en el último tiempo eran ocupados por indigentes, quienes escaparon tras el aviso de incendio.

Carabineros sabía del hecho, ya que en más de alguna ocasión debieron acudir al lugar ante el reclamo de los vecinos por ruidos molestos y consumo de alcohol.

El fuego comenzó la madrugada de ayer en la casa de un piso, sin que hasta el momento sea establecida la causa del fuego.

"La alarma fue un poco tarde. Trabajamos con tres compañías por más de tres horas y media", señaló Oscar García, comandante de Bomberos, quien agregó que como el fuego afectó a dos casonas de maderas antiguas y secas, como más de 70 años, las llamas consumieron totalmente los inmuebles.

"No pudimos evitar la destrucción de las casas, pero sí logramos salvar inmuebles vecinos, como por ejemplo una casa que estaba a sólo metros", detalló el comandante de bomberos de Río Negro.

Si bien la emergencia no reportó personas heridas, cuatro voluntarios de bomberos debieron ser atendidos en el lugar y luego trasladados al Hospital de Río Negro, donde fueron atendidos y luego dados de alta sin lesiones.

"Afortunadamente el problema que presentaron los bomberos no pasó a mayores. Son los riesgos que se corre en esta labor", expresó el comandante.

Pasadas las 8 de la mañana de ayer hubo un rebrote de fuego en los escombros, el cual fue controlado dos horas más tarde por bomberos.

La Fiscalía de Río Negro recabó los antecedentes de esta emergencia ocurrida en el barrio Estación de la comuna, y que transformó en cenizas dos antiguas y emblemáticas casas de la comuna.

"No pudimos evitar la destrucción de las casas, pero sí logramos salvar inmuebles vecinos".

Óscar García

Comandante de Bomberos