Ingeniero osornino crea programa líder en América para administrar los condominios
INICIATIVA. David Peña, junto a dos compañeros de universidad, elaboraron el software Comunidad Feliz, que ya funciona en México y otros países de la región. La plataforma nació por la falta de claridad en los cobros de gastos comunes.
Debido a la necesidad de tener softwares de administración de condominios que sean más claros y con procesos de pago de gastos comunes estandarizados, el ingeniero osornino David Peña, junto a sus socios y compañeros de universidad Antti Kulppi y Pablo Exss, buscaron una fórmula que hoy los tiene extendiéndose como empresa a lo largo del continente.
David Peña tiene 29 años y hace 10 años se fue a Santiago para estudiar Ingeniería Civil Industrial con mención en computación en la Universidad Católica. Fue en esa nueva vida donde descubrió que gran parte de los chilenos tenían dentro de sus pagos mensuales un ítem totalmente desconocido para él hasta ese momento: los gastos comunes.
El profesional confesó que todo comenzó cuando estudiaba en el Colegio Francés de la cuidad, donde practicaba su informática e incluso "hackeó" el sistema computacional desde la sala que el establecimiento tiene para esos fines.
"Desde chico jugué en los computadores de mi colegio, de hecho instalé una especie de 'troyano' en los computadores para meterme en ellos desde mi casa. Obviamente nunca hice nada muy ilegal, pero siempre jugué 'hackeando' computadores", relató.
Comunidad Feliz
"Cuando partí a Santiago, empecé con todos los problemas que tienen los estudiantes de regiones, me vi con poca plata y tenía que organizar las cuentas. Es sencillo calcular cuánto se gastará en agua, electricidad o internet porque son cuentas bien estables. No obstante, el gasto común no lo es, ya que pueden salir 60 mil pesos, pero cuando se enciende la calefacción llega a 120 mil pesos, por ejemplo", explicó.
Esta dificultad hizo que pasara por varios departamentos durante su vida estudiantil, hasta que con otros dos compañeros, que actualmente son sus socios, se dieron cuenta que los tres habían tenido el mismo problema y de ahí nació la idea de hacer una aplicación para estandarizar la información que entregan los administradores de edificios y condominios sobre los gastos.
El software fue creado en 2015 y partió siendo en línea, utilizado por los administradores para generar los gastos comunes. Ellos suben los gastos, pagos, remuneraciones de la comunidad y el gasto común se genera automáticamente con un formato profesional, donde sale desglosado cuánto paga cada unidad.
Luego el software evolucionó, ya que generaron un módulo de remuneraciones y además está conectado con la Dirección del Trabajo.
La plataforma se ha enfocado últimamente en la seguridad, ya que los residentes pueden ingresar a ella para ver los libros de visitas y la bitácora del conserje.
"Tenemos hartas funciones que ayudan a los residentes a vivir más felices. Ese es el objetivo del programa", indicó.
En el mercado hay otros softwares que tienen la misma finalidad, pero David Peña aclara que la diferencia de Comunidad Feliz está en la tecnología, ya que los otros tienen sistemas más complejos para usar, debido a que comenzaron antes.
"Eso se nota en el crecimiento. Tenemos más de dos mil edificios en estos tres años y a otros programas esto mismo les ha tomado más de 10 años. Creo que es como la evolución entre My Space y Facebook. Facebook no fue la primera red social, pero por la facilidad de usarla, le ganó a las otras redes sociales", manifestó.
Agregó que el programa también cuenta con varios sistemas de capacitación y de asistencia al administrador que nadie más tiene en Latinoamérica.
En el continente
El software tiene 1.500 clientes en Chile y cinco edificios lo utilizan en Osorno. No obstante, ya salió de las fronteras del país y está presente en México, Bolivia, Ecuador, El Salvador y Guatemala.
David Peña cuenta que el caso de México es el más sorprendente, ya que la inmobiliaria más grande del país azteca, llamada Tierra y Armonía, empresa que levanta 200 edificios al año, lo utiliza. Una embargadora los obligó a buscar una buena alternativa para la administración.
"Miraron a todos, de hecho buscaron soluciones mexicanas. Pensamos que esa competencia no la ganaríamos, porque era raro que la buscaran en Chile. Reunieron más de 20 aplicaciones similares y ganamos", relató Peña.
Así, el negocio incluyó a todos los edificios, donde el trabajo realizado fue tan bueno, que la inmobiliaria mexicana decidió invertir en la empresa del osornino, con lo que ya está establecida en ese país.
Por ahora Comunidad Feliz se encuentra en un segundo proceso de levantamiento de capital, el cual involucra dos millones de dólares para convertirse en la aplicación líder de Latinoamérica en su tipo.
"Queremos convertir a Comunidad Feliz en la primera aplicación que las personas miren al comenzar el día. Para eso tenemos que crear un marketing place para vecinos, para que se puedan vender cosas entre personas que vivan cerca. Tenemos que crear un área que englobe a los proveedores, para que además del gasto común se puedan pagar en línea otras cuentas como agua, electricidad o internet", concluyó el ingeniero.
5 edificios de Osorno utilizan la aplicación Comunidad Feliz que fue creada por el ingeniero osornino.