"No le corresponde a la prensa o a este alcalde juzgar a una persona antes que el juez se pronuncie"
Bernardo Candia, alcalde de La Costa, por formalización de su administradora
"Nuestros asesores legales y económicos hicieron una contundente defensa de nuestro caso"
Eduardo Schwerter, Fedeleche, por audiencia de petición de salvaguardias
Aún atemorizado por el macabro hallazgo se encuentra un menor osornino de 15 años, alumno del Liceo Santa Teresa, quien mientras buscaba latas bajo el puente Bulnes encontró un cráneo al interior de un saco. Inmediatamente llamó a Carabineros, que constató que se trataba de una pieza humana.
Un llamado telefónico realizado por una mujer al abogado Sergio Toloza fue la clave que llevó a dar con el paradero y detención de Boris Casanova, quien está sentenciado a 25 años de cárcel por el crimen de una escolar de 13 años en San Juan de La Costa. El prófugo fue ubicado en casa de familiares en Talca.
El 15 de noviembre debe ser entregado oficialmente el puente sobre el río Damas que unirá la zona centro con la población Maximiliano Kolbe. La inversión total es de 46 millones de pesos, de los cuales el municipio aportó con $30 millones y el Ministerio de Obras Públicas con las vigas, que costaron 16 millones de pesos.
Basta recorrer las diferentes rutas de la zona para visualizar una grave paradoja que afecta a la provincia de Osorno. Un territorio con clara vocación turística como éste, que sólo desde hace pocos años viene comprendiendo las inmensas oportunidades que brinda esta actividad económica, obliga a los visitantes nacionales e internacionales (sobre todo argentinos que entran a través del Paso Cardenal Samoré) a sufrir un verdadero calvario a la hora de circular por las carreteras y vías rurales, merced a los innumerables hoyos, baches, desniveles e incluso puentes en mal estado que serpentean por la zona.
El ejemplo más reciente de vías en mal estado se vio en la Ruta 215, que en menos de una semana fue escenario de dos accidentes carreteros claramente influenciados por su deterioro. El primero se registró el viernes pasado en el sector de Los Pellines, donde producto de un hoyo, volcó un automóvil que transportaba a siete profesoras que se dirigían a Argentina. Afortunadamente no hubo víctimas fatales que lamentar, aunque todas las docentes resultaron heridas. El segundo ocurrió el lunes, cuando un vehículo cayó al río Chanleufu, debido a que su conductor perdió el control del móvil al pasar sobre una poza de agua en el acceso al puente.
Por alguna extraña razón, el mismo panorama de caminos en mal estado se repite en la vía que va desde Osorno a Las Cascadas, en la comuna de Puerto Octay; en la peligrosa ruta al mar; y en el Camino Real. Y por alguna razón doblemente misteriosa, los múltiples trabajos de mejoramiento que se han realizado a estas vías duran muy poco, pues, tal como lo testimonian sus sufridos usuarios, al poco tiempo deben comenzar a sortear, otra vez, los inefables baches y desniveles.
Es innegable que detrás de la mantención de estas vías, todas estratégicas para la conectividad, el desarrollo turístico y el fomento agrícola, hay problemas de gestión y/o financiamiento. De otra forma no hay manera de explicar que las permanentes obras de mejoramiento ofrezcan tan poca durabilidad. Al final, además, el Estado termina pagando más por obras con fecha de pronto vencimiento.
La movilidad territorial para realizar estudios superiores es una realidad para muchos estudiantes, especialmente en regiones como la de Los Lagos. Muchos realizan viajes cotidianos para estudiar en universidades de la misma región, mientras que otros emigran para estudiar en ciudades más distantes. Esto es importante al considerar la próxima rendición de la PSU.
Los datos muestran que los estudiantes universitarios originarios de la Región de Los Lagos, cuyos ingresos familiares son más bajos, tienden a estudiar en la misma región. Entre quienes emigran, muchas veces sus familias deben hacer un esfuerzo económico mayor para solventar los estudios. Esto fue estudiado en una tesis elaborada por el Dr. Felipe Saravia, en el Doctorado de Ciencias Sociales en Estudios Territoriales de la Universidad de Los Lagos.
Además, un estudio recientemente publicado por un estudiante del mismo doctorado, Claudio Pareja, muestra que la mayor parte de quienes han obtenido la gratuidad para sus estudios universitarios y que son originarios de la Región de los Lagos, cursan estudios en la misma región. Como es sabido, gracias a la gratuidad, las familias correspondientes al 60% de menores ingresos de la población, cuyos miembros estudien en instituciones adscritas a este beneficio, no deberán pagar arancel ni matrícula durante la duración de la carrera.
Los años de duración de los estudios universitarios tienen un costo económico e implican también largas experiencias de vida que varían dependiendo de la movilidad territorial, pues estudiar en la misma región o bien emigrar puede ser satisfactorio o insatisfactorio, según el estudio del Dr. Saravia. Finalmente, investiga cómo al egresar de la universidad e iniciar una actividad laboral, las opciones de movilidad territorial que se hayan adoptado, contribuyen en mayor o menor medida a un ascenso social y a un aporte a la región de origen.
Así, la movilidad territorial por estudios universitarios está claramente vinculada a la desigualdad social. Las universidades estatales regionales contribuyen a disminuir estas desigualdades vinculadas a la movilidad territorial, junto con su dedicación a mejorar la calidad de la educación superior.
Óscar Mac-Clure, académico e investigador
del Ceder de la Universidad de Los Lagos