Valor de importaciones lácteas desde Nueva Zelanda creció 121%
COMPETENCIA. La compra de productos lácteos en el extranjero aumentó en 2017 respecto al año anterior. Esto preocupa a los productores locales y en el sector se indica a la neozelandesa Fonterra como una de las impulsoras de la tendencia.
La importación de leche y productos derivados es un tema sensible por estos días en el rubro lechero. Un tema al cual se oponen los gremios de productores lecheros, debido a que -aseguran- los perjudica directamente.
Debido a ello, solicitaron a la Comisión Nacional Antidistorsiones aplicar salvaguardias a los productos importados, petición que fue acogida por la entidad.
Este requerimiento busca gravar con un impuesto adicional de 30% a las leches en polvo y un 27% a los quesos, ya que según la Federación Nacional de Productores Lecheros (Fedeleche), vienen con precios distorsionados desde sus países de origen.
Al revisar las cifras oficiales de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), se observan variaciones en cuanto a la participación del mercado de lácteos enviados a Chile.
Si antes Estados Unidos y Argentina concentraban la mayoría de la torta, hoy el líder es Nueva Zelanda, que pasó de enviar a Chile entre enero y octubre de 2016 6.435 toneladas, a 11.722 toneladas en el mismo periodo de 2017, con un aumento de 82,16%.
En detalle, entre enero y octubre del año pasado fueron importadas 9.231 toneladas de leche en polvo sin azúcar con más de 26% de materia grasa, lo que se traduce en un alza de 64,5% respecto al mismo periodo del año anterior.
En cuanto a la leche líquida sin azúcar, se importaron entre enero y octubre del año pasado un total de 2.632 toneladas, o sea, 19,3% más que en igual periodo del 2016.
También se incrementó la cantidad de queso importado por nuestro país. Entre enero y octubre del año pasado ingresaron al país 39.847 toneladas, un 44,1% más que durante esos meses de 2016.
Un 22,9% de los lácteos importados en el periodo estudiado provienen del país oceánica. En segundo lugar se ubican los Estados Unidos, con 20,1%, mientras que el podio lo cierran nuestros vecinos trasandinos con 14%.
El grueso de lo importado corresponde a leche en polvo, mantequilla y quesos.
Según la propia Odepa, "la producción de leche alcanza a 2.650 millones de litros y genera entre 100 y 130 mil toneladas de quesos y leches en polvo y otros derivados. El consumo de lácteos en el país se acerca a 150 litros per capita". ¿Por qué en importaciones se habla más de toneladas y para la producción local de leche se emplean los litros? Porque el grueso de lo importado corresponde a leche en polvo, mantequilla y quesos.
La entrada de los kiwis
Justamente Nueva Zelanda juega un papel fundamental en este escenario actual, dado que el valor de sus importaciones de lácteos a Chile subió un 121% entre 2016 y 2017, pasando de 29 millones de dólares a US$65.260.000.
En el sector se indica a la empresa Fonterra como una de las impulsoras de la tendencia. Líder mundial en fabricación de productos lácteos, la firma es también la mayor exportadora del mundo. La heredera del New Zealand Dairy Board, creado en 1920, tiene presencia en decenas de países alrededor del mundo, incluido Chile. Aquí controla Soprole y Prolesur.
A través de Soprole, Fonterra introduce en el mercado chileno productos lácteos y leche provenientes de Nueva Zelanda, país que ha reunido condiciones óptimas para transformarse en un gran exportador en la materia: poca población, alta tecnología y mecanización, mano de obra cualificada, buenas praderas y alto rendimiento por hectárea en la producción lechera. Los "kiwis" aumentaron en valor 121% los envíos de lácteos a nuestro país, más que cualquier otro exportador al que le compramos.
De este modo, la nación oceánica se ha convertido en un referente en lo que a lácteos se refiere, compitiendo (y ganándole) a potencias históricas del sector como Argentina, Francia y Alemania. En esto Fonterra ha sido su principal aliado y embajador a nivel planetario.
Reemplazo de productos
Como siempre, en nuestra zona la importación de leche molesta, especialmente cuando, a juicio de los productores, esta viene desde la "competencia desleal".
Michel Junod, gerente de Aproleche, señaló que "está re complicado el tema. El reemplazo que la industria está haciendo de la leche chilena por leche importada proveniente de Nueva Zelanda, es fuerte. Las importaciones son equivalentes a 1,2 veces la producción de la Región de Los Ríos. Están reemplazando la producción completa de una región".
Sobre las causas, Junod dijo que "no tengo la explicación. Lo que sí puedo comentar es el efecto que está provocando, y es que a los productores neozelandeses les están pagando más por el litro de leche, por lo tanto se privilegia esa leche frente a la nacional".
Al respecto agregó que "es curioso. Miden al productor nacional con la misma vara con la que miden al neozelandés. Pero a ellos les pagan por leche producida exclusivamente en primavera y verano, sin tener el costo de producir en invierno, que es tremendamente caro. Al chileno se le paga sin tener en cuenta ese alto costo".
Dieter Konow, presidente de Aproleche, señaló que "en el fondo se va sustituyendo leche chilena por productos lácteos importados". Explicó que "esto se vino incrementando durante los últimos tres años, siendo que nosotros éramos no solo autosustentables en lácteos, sino que los exportábamos".
Sobre el porqué del cambio de ser un exportador neto a un importador, Konow dijo que "básicamente tuvo que ver con un cambio en la industria compradora. Soprole ha dejado de ser comprador de leche interna, trayendo muchos productos de Nueva Zelanda".
Las empresas de Fonterra en Chile no son las únicas que importan lácteos. Nestlé y Watt's, otros importantes actores de la industria también lo hacen. De hecho, esta última empresa a través de su marca Loncoleche vende únicamente leche reconstituida.
Una práctica habitual a la hora de exportar grandes cantidades de leche, es secarla y venderla en polvo, siendo reconstituida en el destino. ¿Esta leche es igual a la "natural" sacada directamente de la vaca y luego pasteurizada?
El director de la escuela de Ingeniería en Alimentos de la Universidad Austral, Javier Parada, señaló que "las propiedades organolépticas son distintas. O sea, sabor, textura en la boca, color. También se afectan algunas propiedades como la solubilidad".
Sin embargo, explicó también que respecto a su valor y aporte nutricional "son prácticamente idénticas. Se pierden algunas características menores como algunas vitaminas. A las proteínas y al calcio no les pasa nada. Afecta mucho más sacar la grasa al descremar la leche que secarla, de hecho ahí pierde más vitaminas porque eliminas las liposolubles".
Satisfacer la demanda
Prolesur, empresa chilena de Fonterra, respondió sobre este aumento de las importaciones de lácteos neozelandeses, explicando que obedece a un incremento de nuestra demanda interna, que la producción local no es capaz de satisfacer.
"El incremento en Chile de las importaciones de productos lácteos obedece al aumento de la demanda interna, la cual no alcanza a ser absorbida por la producción interna de leche. Lo anterior hace que, al igual que otras industrias como la carne y el trigo, se deba recurrir a la importación de productos para poder satisfacer la demanda de los consumidores", señalaron desde la compañía osornina.
La empresa agregó que "en el caso del queso, aunque la producción ha crecido en Chile en los últimos tres años, ésta no ha sido capaz de abastecer la demanda local. La importación de leche entera en polvo -que corresponde en términos de litros de leche a un cuarto de las importaciones de queso- es consecuencia de la disminución de la producción de leche entera en polvo en Chile".
Por último, explicaron que su vocación es y sigue siendo el procesamiento de leche fresca local: "Prolesur representó sólo un 20% y un 28% de la importación de queso Gouda en 2016 y 2017 respectivamente. El negocio de la compañía es procesar leche fresca, y prueba de ello es que el año 2017 invirtió en un proyecto para aumentar en un 40% su capacidad de producción de queso".
De acuerdo a Soprole, es Prolesur la marca de Fonterra en Chile que importa lácteos, no así ellos. Sin embargo, uno de los grandes clientes de Prolesur es justamente su compañía hermana Soprole. Al mismo tiempo, aducen que al importar de la forma en que lo hacen ellos, evitan que otras empresas traigan al país productos ya envasados completamente en otros países, que no requieren pasar por la industria nacional.
Por su parte, Nestlé y Watt's fueron contactados por este medio pero no enviaron respuesta al momento del cierre de la presente edición.
"El reemplazo que la industria está haciendo de la leche chilena por leche importada proveniente de Nueva Zelanda, es fuerte"
Michel Junod, Gerente de Aproleche Osorno"
"Las propiedades organolépticas son distintas. O sea, sabor, textura en la boca, color. También se afectan algunas propiedades como la solubilidad"
Javier Parada, Ingeniero en Alimentos"