El bajo nivel del lago Llanquihue preocupa a vecinos de Octay
MEDIO AMBIENTE. Sólo basta con recorrer las orillas para ver que parte del lecho del lago se encuentra seco e incluso hay muelles embancados. Pese a ello, las instituciones estatales carecen de estudios al respecto. Experto de ULagos señala que las escasas lluvias y la poca acumulación de nieve en el volcán Osorno son las causas del fenómeno.
Marcos Lobera vive hace 40 años en Puerto Octay y conoce al revés y al derecho la playa que rodea a la ciudad, en la orilla del lago Llanquihue.
Sabe que algo extraño le pasa al principal atractivo turístico de la zona desde hace un par de años, debido a que a esta fecha gran parte de la ribera no ha sido cubierta por el agua y a simple vista se pueden ver piedras y superficie que ya en otoño debiese estar tapada con el agua del lago.
Según expertos en el tema y autoridades de la comuna, la escasa lluvia caída en los últimos meses, sumado a las altas temperaturas presentadas en el verano y el poco hielo o nieve acumulado en los principales picos que surten de agua al Llanquihue, son los responsables de que la playa haya retrocedido hasta 20 metros en algunos casos, su cota más baja, según afirman, en cerca de 40 años.
Muelle
Una de quienes se ha dado más cuenta de lo que sucede en la playa de Centinela, es la concejala Carmen Ortiz. La edil posee justamente un terreno a orillas de la playa y ahí tiene muelle que fue construido hace varios años ya, donde junto a su familia botaban pequeñas embarcaciones con las que surcaban el Llanquihue, especialmente durante el verano.
Desde hace 10 años el muelle comenzó a embancarse producto de que las aguas comenzaron a retroceder.
"Cuando mis hijos eran pequeños, el agua llegaba hasta allá -dice apuntando con el dedo, una extensión que va de entre 15 a 20 metros- y yo tomaba sol a orilla del agua, que llegaba hasta allí" (explica señalando una distancia que parece difícil de creer).
Para Ortiz, el cambio en los últimos años ha sido tremendo. A su juicio, las razones se debe a lo poco que ha llovido en el último tiempo, a la escasa presencia de nieve y de las vertientes que surten de agua al lago.
"El volcán Osorno sólo tiene un cono y no está cubierto de nieve como debería estar", señala mientras asevera que al ver el lago todos los días, nunca se había dado cuenta del verdadero cambio que ha sufrido la zona en los últimos años.
Como directora de la agrupación que reúne a las comunas que están ubicadas a orillas del lago Llanquihue -Frutillar, Puerto Varas y Llanquihue-, Ortíz explica que hasta el momento no han tenido reuniones a nivel intercomunal con el fin de tocar el tema, pero que debido a la gravedad del problema, será propuesto en la próxima reunión.
Alcaldes
Ramón Espinoza, alcalde de Frutillar, señala que la baja en el nivel del lago Llanquihue no es un tema que le sea desconocido. Afirma que este ha sido el año donde más ha bajado la cota del lago y eso es una preocupación para la comuna, debido a que la mayor parte de sus habitantes viven del turismo en torno a uno de los lagos más grandes de Sudamérica.
Lo mismo sucedería con las actividades deportivas, las cuales también son un elemento importante para la comuna que dirige. "Afecta a la actividad náutica y al velerismo que se practica aquí, y también la pesca recreativa".
Espinoza señala que el problema se debe al cambio climático, con cada vez menos lluvias.
Por eso, una de las próximas tareas a realizar junto a las otras comunas que integran la cuenca del lago Llanquihue, será buscar una manera para enfrentar el nuevo escenario.
"Justamente este mes estamos tramitando la personalidad jurídica de la agrupación que congrega a las comunas que rodean al lago Llanquihue y de esta manera optar a proyectos que nos ayuden a superar este problema que se está viendo desde hace ya varios años", dice.
La idea sería realizar estudios que ayuden a determinar o a cuantificar la baja que ha sufrido el lago y de esta manera cuidar el patrimonio que representa para las comunas.
El representante comunal de Puerto Octay, Carlos Mancilla, señala que históricamente en esta época del año siempre se ha notado una baja en la cantidad de agua del lago, pero que debido a una sequía prolongada y al déficit de nieve en montañas y volcanes, este año ha sido mucho más, hasta embancar varios de los muelles que hay en la zona.
Y si bien la prolongación de este fenómeno puede afectar al turismo, Mancilla indica que actualmente trabajan en el proyecto de la costanera Pichi Juan, donde en octubre próximo estarían realizando la licitación para desarrollar el diseño con un presupuesto de $84 millones, fondos provenientes desde el Ministerio de Obras Públicas (MOP), para que en octubre de 2017 comience la licitando para la construcción de la obra.
Dentro de ese presupuesto, explica Mancilla, deberían haber recursos para el trabajo de desbancamiento de los muelles locales y de esta forma recuperar la navegabilidad que siempre ha presentado la comuna, con embarcaciones de hasta 2,5 metros de calado y así desde la costanera de Puerto Octay, tal como ocurrió entre fines del siglo XIX y mediados del XX, conectarse con las otras comunas a través del lago.
Sin mediciones
Pese a lo complejo del tema, ninguna institución del Estado se encarga de medir el Llanquihue, por lo que no se puede determinar cuánto ha bajado.
El director de la Dirección General de Aguas (DGA), Javier Vidal, señaló que no hay estudios que determinen el nivel exacto del descenso.
"Sólo contamos con estudios que nos señalan acerca de la calidad del agua", dijo.
En la Capitanía de Puerto Varas indicaron que como Armada tampoco poseen estudios acerca del nivel del lago Llanquihue o de los lagos en la zona.
"Estamos al tanto que todos los lagos de la Región han experimentado una baja en sus niveles de agua y esto se debe netamente al cambio climático", señaló el capitán de puerto, Ricardo Alcaino.
Asimismo, instituciones como el Instituto Geográfico Militar o el Shoa se encuentran en la misma situación.
Por su parte, el geógrafo y académico del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad de Los Lagos (ULagos) y doctor en Geografía, Gonzalo Mardones, señala que lo que está sucediendo en el lago Llanquihue es producto de un fenómeno global asociado al cambio climático, donde cada vez se observan veranos más largos con escasas lluvias, contrario a lo que sucedía tiempo atrás.
"Esa es una razón, pero el hecho de que la temperatura global haya aumentado, hace que la cantidad de nieve que suele surtir a este lago desde la cordillera sea menor y por lo mismo, se nota una baja en la cota", señala.
Según el académico que lleva 15 años trabajando para la universidad estatal, en invierno es mucho menor la cantidad de hielo acumulada, lo que hace que los niveles bajen notablemente durante el año; es decir, se suman fenómenos asociados al clima y al alza de la temperatura.
Si bien no existen estudios al respecto, Mardones explica que sólo es cosa de observar -por ejemplo- lo que sucede con el volcán Osorno, donde la vertiente norte y el casquete glaciar han desaparecido, perjudicando también al lago.
Otro problema con el Llanquihue -detalló el experto- es que se encuentra más alejado de vertientes cordilleranas que los otros lagos de la Región, lo que también incide en su menor nivel.
"El hecho de que la temperatura global haya aumentado, hace que la cantidad de nieve que suele surtir a este lago desde la cordillera sea menor y por lo mismo, se nota una baja en la cota".
Gonzalo Mardones, Geógrafo de la Universidad de Los Lagos
15 y hasta veinte metros ha retrocedido el lago Llanquihue en algunos lugares de Puerto Octay, lo que preocupa a las autoridades de la cuenca.
2 últimos años el retroceso del agua ha sido más evidente que en años anteriores, según vecinos. Los expertos señalan que se debe mayormente a la poca nieve acumulada en el volcán Osorno.
Siglo XIX y hasta mediados del XX se realizó la navegación por el lago Llanquihue, donde diversos vapores conectaron entre sí las ciudades de la cuenca.