Inician proyecto para eliminar los tábanos por impacto en el turismo
INNOVACIÓN. Fundación Chile prueba 100 tipos de larvas de gusanos como control biológico de estos insectos en su etapa reproductiva. El organismo se adjudicó $93 millones de los fondos del royalty para la investigación que apunta a reducir los efectos negativos del también conocido como coliguacho.
El panorama se ve ideal, los rayos de sol acompañan y las lluvias son parte del pasado. El bosque, el lago u otro destino atractivo de la provincia son la alternativa que muchas familias de la zona y también de otras partes de Chile toman para disfrutar del verano durante los primeros días de enero. Y en eso están cuando de pronto un zumbido leve y luego más intenso interrumpe su descanso.
Es un insecto peculiar que sigue a los visitantes atraídos por el movimiento, se posa en sus ropas, busca algo de piel y con sus pequeñas sierras pica a sus víctimas. La picadura algo duele, pero generalmente no causa mayores dificultades, salvo alergia en algunas personas.
El problema es que no se trata de un insecto, sino de una plaga. Al primer tábano se van sumando uno, otro y otro. Se vuelve prácticamente en una lucha, donde las personas tratan una y otra vez de esquivarlos, pero sin éxito. Algunos visitantes se acostumbran a la dinámica, mientras que para otros se vuelve un tormento, tras lo cual terminan prometiendo no regresar a la Región, al menos durante enero.
Considerando el daño que provocan estos insectos en la actividad turística, un grupo de investigadores de la Fundación Chile trabaja para eliminar al molesto tábano o coliguacho (scaptia lata), el que aparece justo en la temporada de más calor y actividad en los centros turísticos.
Primeros pasos
El proyecto que ejecutan bajo la denominación "Desarrollo e implementación de sistema de control de scaptia lata", tiene un desarrollo de 18 meses y cuenta con el financiamiento del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) por 93 millones de pesos, dinero que se destinan a la Región por el royalty minero para que se ocupe exclusivamente en proyectos de innovación.
Gloria Garín, integrante de la investigación en Fundación Chile, cuenta que la iniciativa se encuentra en plena etapa de ejecución, en la fase de control biológico del tábano que aparece entre diciembre y enero.
Las primeras muestras de larvas de tábanos se tomaron en enero de este año. Fue un entomólogo (científico que se dedica a estudiar los insectos) quien recolectó 300 larvas en diversos lugares húmedos de la comuna de Puyehue, entre ellos los sectores Gol Gol, La Hoyería, el Remanzo, El Retiro, El Caulle, Aguas Calientes y Anticura.
Y con estas 300 larvas se iniciaron pruebas de control biológico para las cuales se usó nemátodos (es decir pequeños gusanos), cuyo propósito es germinar las larvas del tábano y provocar su muerte antes de su desarrollo adulto.
Búsqueda de nemátodo
Búsqueda de nemátodo
Por estos días, la Fundación Chile trabaja en conjunto con el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (Inia) en las pruebas, ya que la entidades es la única que tiene un banco de nemátodos que sirven al proyecto.
Ya se han seleccionado 100 tipos de nemátodos, los que se estudiarán para hacer una selección y definir cuál de ellos tiene mayor impacto en la larva del tábano.
Así, la idea es encontrar un nemátodo similar al que encontró la investigadora argentina Patricia Stock en 1991, quien reportó por primera vez la existencia de una especie de nemátodo llamado Pellioditis Pellio, que tiene la capacidad de parasitar larvas de tábano o coliguacho.
"Buscamos un nemátodo entomopatógeno que tenga la capacidad de matar la larva del tábano tal y como se encontró en Argentina", dice la experta Gloria Garín, especificando que el nemátodo que elimine al tábano debe reproducirse en el mismo lugar que se alimenta la larva de este insecto y donde van dejando huevos.
"Así, la solución se vuelve efectiva con una duración a largo plazo y sin ningún impacto negativo en el medio ambiente, ya que vamos a utilizar larvas naturales de Chile", dice la investigadora Gloria Garín.
Si bien las pequeñas larvas de gusanos (los nemátodos entomopatógenos) se hallan de forma natural en el ambiente (suelo húmedo), los expertos necesitarán hacer pruebas de laboratorio y en tiempo real con tal de definir el tipo y también las concentraciones que deben usar para disminuir o eliminar la población de tábanos.
El proyecto concluirá en junio de 2014 y a fin de este año se espera tener definido el nemátodo que utilizarán para el control de este insecto.
Una vez seleccionada esta larva, se diseñará un sistema de control biológico que será evaluado y comparado con un sistema convencional de trampas tipo new jersey.
Las trampas se ubicarán en tres sectores de la Región con determinadas características, como destinos de alto atractivo turístico, que posean alta presión de la plaga durante la época estival y que cuenten con la presencia del árbol de Tiaca, pues se ha comprobado que el insecto lo usa como fuente de energía y es atrayente natural de ovipostura.
De esta forma, y luego de la implementación del sistema de control biológico, se espera un impacto en los principales destinos turísticos de Osorno, en especial Anticura, Rupanco y el Parque Nacional Puyehue.
impacto turístico
La investigación de Fundación Chile nace tras la observación de los últimos 20 años, considerando que esta plaga causa serios daños a la industria turística de la zona.
Así lo corroboró el director provincial del Servicio Nacional de Turismo (Sernatur), Marcelo Moraga, quien señala que el potencial de venta del turismo durante enero debería ser similar a febrero, pero han detectado que el primer mes del año alcanza apenas la mitad de lo que se vende el mes siguiente.
"Por eso estimamos que la presencia de tábanos genera un impacto negativo en torno al 20% ó 30% en aquellas zonas turísticas cercanas a cordones montañosos y riberas de lagos y ríos", dice el jefe provincial del Sernatur.
En esa línea, sostiene que la investigación que desarrollan los expertos de la Fundación Chile es muy importante para potenciar la actividad durante enero.
Alicia Urrutia, presidenta de la Corporación de Redes Turísticas Contacto Puyehue, también valoró el plan, ya que comenta que el flujo de turistas en la zona en los días donde hay más presencia de tábanos no alcanza al 10% de lo que se registra una vez que los insectos desaparecen.
"Tengo un restaurante y cuando aparecen los tábanos no tengo más de 10 mesas ocupadas, pero cuando estos bichos se van, llegó a tener las 100 mesas llenas de clientes. A veces no se sabe, pero el impacto es muy grande", dice la dirigenta de 16 empresarios turísticos de Puyehue.
Iván Haro, encargado de la División de Planificación del Gobierno Regional, señaló que en el Plan Estratégico de Los Lagos se estableció como un objetivo principal potenciar la competitividad y desarrollo de los sectores productivos, entre ellos el turismo.
"Estudios como éste dan una solución sustentable a un problema real, como es la plaga del coliguacho o tábano, que está comprobado impacta al rubro y a la demanda turística de la zona, ocasionando una merma en los visitantes y por ende limitando las opciones de recreación de los habitantes de nuestra región", argumentó Haro sobre la importancia de esta investigación.
datos
La investigación cuenta con colaboradores externos, entre ellos Inia , un experto entomólogo y un doctor de la Universidad Austral de Chile.
La segunda recolección de larvas de tábanos se realizará durante las próximas semanas de este mes y el fin del proyecto de investigación está proyectado para junio de 2014.